Francia refuerza la seguridad para el partido de fútbol contra Israel tras los enfrentamientos en Ámsterdam
Las autoridades francesas han reforzado la seguridad en París antes del partido de fútbol Francia-Israel del jueves, con la esperanza de evitar que se repitan los violentos enfrentamientos entre la población local y aficionados israelíes al fútbol en Ámsterdam la semana pasada.
El partido de la Nations League en el Estadio de Francia llega en un momento tenso, con las relaciones diplomáticas entre el presidente francés, Emmanuel Macron, y el líder israelí, Benjamin Netanyahu, enrarecidas por la guerra de Israel en Gaza.
Unos 4.000 policías velarán por la seguridad del evento, desplegados en el estadio, fuera del recinto y en los transportes públicos, según informó la policía de París.
"Es una medida excepcional, tres o cuatro veces superior a lo que solemos movilizar", declaró el miércoles a la radio RTL el jefe de la policía de París, Laurent Núñez.
Añadió que sólo se permitirían banderas francesas e israelíes en el interior del estadio.
Macron asistirá al partido como muestra de solidaridad, mientras que el ministro del Interior, Bruno Retailleau, dijo tras los enfrentamientos de Ámsterdam que nunca hubo dudas de que el partido se celebraría como estaba previsto.
Aun así, es probable que la asistencia sea escasa, ya que sólo se esperan 20.000 espectadores en el estadio, con capacidad para 80.000 espectadores, situado al norte de París.
El grupo de hinchas franceses Les Irreductibles Français realizó una encuesta entre sus miembros, que mostró que el 15% boicotearía el partido debido a la guerra entre Israel y Gaza, mientras que alrededor del 30% citó "riesgos para la seguridad".
Las pasiones por la actuación de Israel en Gaza están a flor de piel en Francia, donde viven las mayores comunidades judía y musulmana de Europa. Las denuncias de actos antisemitas aumentaron un 284% "sin precedentes" en 2023, según declaró en junio la Comisión de Derechos Humanos de Francia, mientras que los actos antimusulmanes aumentaron alrededor de un tercio.
La semana pasada se produjeron enfrentamientos en Ámsterdam entre hinchas de fútbol israelíes y lugareños. Al menos cinco israelíes resultaron heridos tras el partido de Europa League del Maccabi de Tel Aviv contra el Ajax.
Aurélien Bernheïm, cofundador del Movimiento por los Judíos Franceses, un grupo juvenil sionista de derechas, declaró que unos 30 miembros de su organización asistirían al partido.
"Pero no lo ocultaré, muchos de estos jóvenes tenían miedo de ir, ya que tenían en la cabeza estas espantosas imágenes de Ámsterdam", dijo.
Walid Attalah, presidente de las Asociaciones de Palestinos en Île de France, afirmó que el partido debería haberse cancelado.
"Rusia ha sido vetada porque hubo la ocupación de Ucrania, fue ilegal, hubo crímenes de guerra, pero Israel nunca es sancionado por lo que hace", dijo.
Algunos partidarios, sin embargo, se encogieron de hombros.
"No estoy preocupado", dijo Yannick Vanhee, que dirige una asociación de aficionados franceses en Dunkerque. "Las autoridades han ido poniendo cada vez más seguridad en estos eventos".
