El GP de América fue multado con 500.000 euros por la entrada de 200 aficionados a la pista.
Los organizadores del Gran Premio de Estados Unidos en Austin fueron sancionados por la FIA con una multa de 500.000 euros por la entrada anticipada de espectadores en la pista, de los cuales 350.000 fueron suspendidos. Al final de la carrera en COTA, cuando los coches aún estaban en las vueltas de enfriamiento tras el final, una multitud de espectadores entró en la recta de salida-meta.
Según las estimaciones de la FIA, unas 200 personas de las gradas situadas frente al pit lane treparon por una valla, se descolgaron dos metros y cruzaron una barrera que les separaba de la pista. Las invasiones tempranas de la pista se consideran una grave violación de los protocolos de seguridad de la FIA, y la dirección de carrera estadounidense y los representantes del COTA están obligados a informar a los comisarios de carrera de la FIA para que se pronuncien al respecto.
Durante la reunión, los comisarios determinaron que el evento "no tomó precauciones razonables, creando una situación insegura", violando así el Código Deportivo Internacional de la FIA. Se impuso una multa de 500.000 euros al circuito de Texas, con 350.000 euros suspendidos hasta el 31 de diciembre de 2026, con la condición de que no se produzcan más infracciones en eventos aprobados por la FIA. Los organizadores deberán presentar a la FIA un plan oficial de mejora antes de finales de año, en el que se esbocen medidas para evitar que se repitan e investigar otras posibles áreas de infracción en torno a la pista de 5,5 km.
Las autoridades declararon que el plan de seguridad del evento para admitir espectadores en la pista se aplicó adecuadamente; sin embargo, los organizadores pasaron por alto una posible zona de infracción en la recta principal que causó problemas de seguridad el domingo. Los problemas de control de multitudes se han convertido en un tema recurrente en los últimos años. A principios de 2024, los organizadores del Gran Premio de Canadá fueron llamados por la FIA por la entrada de aficionados a la pista mientras los coches aún estaban en ella.
En 2023, el Gran Premio de Australia celebrado en Melbourne también experimentó problemas de invasión de pista, y se pidió a los organizadores que presentaran un informe de mejora similar al organismo rector. Los organizadores de Melbourne decidieron prohibir a los aficionados la entrada a la pista para la carrera de este año en Albert Park. El año pasado se produjo una situación similar en el Gran Premio de Brasil, cuando los aficionados entraron en la pista de Interlagos por la curva 1 mientras los coches recibían la bandera a cuadros.
Los comisarios recomendaron que la parte garantizada de la multa se destinara a iniciativas de seguridad en el automovilismo gestionadas por el Departamento de Seguridad de la FIA.
